El francés lidera la general de pilotos con 182 puntos, 89 más que su rival y compañero de equipo más cercano, Jari-Matti Latvala. La próxima cita, el rallye de casa de Volkswagen (del 20 al 23 de agosto), presentará a Ogier y su copiloto Julien Ingrassia su primera oportunidad para alzarse con el título.
Incluyendo Alemania, restan cinco citas del WRC 2015 y sólo cuatro pilotos pueden evitar matemáticamente que Ogier revalide el título. Latvala es el mejor situado, seguido de Mads Ostberg (a 98 puntos), Andreas Mikkelsen (a 99 puntos) y Thierry Neuville (a 112 puntos).
Para que Ogier sentencie el título en Alemania, necesitaría ganar el rallye y sumar los tres puntos extras del Power Stage, además, Latvala no tendría que terminar mejor que en el octavo lugar y que Ostberg y Mikkelsen no fueron mejores que cuartos.
La victoria en Alemania no será nada fácil para Ogier, que ha sufrido tres accidentes en las dos últimas ediciones de la carrera germana. En 2013 rompió la suspensión y finalizó 17º, mientras que el año pasado quedó fuera de la pelea por la victoria el viernes y acabó abandonando definitivamente el sábado tras sufrir un gran accidente.
“Los últimos dos años fueron un desastre para mí en Alemania”, ha reconocido Ogier. “Durante los dos últimos años y medio hemos tenido un buen rendimiento, pero no en Alemania. Puedo decir que Alemania se nos ha dado realmente mal, espero que podamos cambiar esta tendencia, es muy importante para mí y para el equipo sería bueno, así alcanzaríamos la felicidad completa. Tenemos que seguir trabajando”.