Como piloto con mucha de experiencia en el World Rally Car, Mikkelsen fue elegido como favorito para la primera cita de la temporada como piloto invitado, y el noruego no decepcionó.

Ha ganado todas, excepto una de las siete especiales disputadas hasta la fecha en los Alpes franceses, aunque su compañero de equipo Kopecký ofreció una fuerte competencia hasta que un pinchazo retraso al campeón checo.

«No hace falta decir que fue una gran pelea al principio, pero empezamos con cautela y luego gradualmente aumentamos el ritmo. Ahora nos sentimos como en casa en el coche, aunque en realidad eran condiciones extremadamente difíciles”, ha dicho Mikkelsen.

Kopecký cayó detrás de Bryan Bouffier en tercera posición, pero rápidamente recuperó la plaza. Terminó a más de dos minutos del francés que tocó una roca en la penúltima especial y perforó el neumático trasero izquierdo de su Ford Fiesta R5.

Eric Camilli fue cuarto con un Ford Fiesta R5, a pesar de ir salirse después de una mala nota de su copiloto, que le costó cuatro minutos. Quentin Gilbert fue quinto en otro Fiesta R5, con Emil Bergqvist completando los seis primeros.

Los abandonos incluyen al campeón italiano Giandomenico Basso con un motor sobrecalentado, Armin Kremer, que estrelló su Fabia R5, Quentin Giordano, que no pudo reengancharse esta mañana después de los problemas del motor de anoche, y Yoann Bonato.

El belga, que lideró tras la truncada jornada de apertura del jueves, amplió su ventaja hasta 45.1 segundos después del día más largo del rallye de cuatro días.

Ogier se recuperó de su error inicial para remontar y recordar a Neuville que esta cita inaugural del Campeonato del Mundo de Rallyes de la FIA 2017 está lejos de terminar, con dos días más en las carreteras de montaña en los Alpes franceses.

Neuville fue el primer piloto en ganar tres especiales consecutivas con su Hyundai i20 Coupé WRC. Se defendió de los ataques de Kris Meeke y Ott Tänak antes de que Ogier arrebatase el segundo puesto a su compañero al ganar los últimos dos tramos.

Neuville caló dos veces el motor de su coche, pero el segundo incidente en la útima especial resultó el más costoso. «Perdimos el impulso del turbo, me detuve en una horquilla y no presioné el botón de reinicio, conduje unos 500 metros antes de recordar que debía reiniciar el sistema», dijo.

Kris Meeke fue el más cercano perseguidor de Neuville hasta que se deslizó sobre una capa de hielo y golpeó un talud, rompiendo la suspensión delantera de su Citroën C3 WRC y abandonando (abajo). Tänak, el más rápido en la especial de apertura, tomó la persecución y se mantuvo en segundo lugar hasta que Ogier lo superó. La brecha entre ambos es de tres décimas de segundo.

Jari-Matti Latvala asumió el papel de líder Toyota en el cuarto puesto tras el abandono de su compañero de equipo Juho Hänninen, que se salió fuera de la carretera golpeando un árbol cuando era tercero (abajo).

El día de Latvala no estuvo ausente de problemas. Su coche se negó a arrancar en el parque cerrado y como el equipo trabajó para solucionar el problema, se les acabó el tiempo para afinar su puesta a punto. El finlandés también hizo un trompo en la especial final y terminó a 1 minuto y 24.3 segundos detrás de Tänak.

Dani Sordo y Craig Breen estuvieron muy cerca todo el día. El i20 Coupé WRC de Sordo se estancó varias veces en horquillas, mientras que Breen sobrevivió a un semi vuelco y una salida en la misma curva del accidente de Hänninen. Ambos están separados por 6.3 segundos.

El líder del WRC 2 Andreas Mikkelsen es séptimo con un Skoda Fabia R5 por delante de Elfyn Evans, quien sufrió una salida con su Fiesta en el mismo lugar que Ogier. Los otros pilotos de Skoda, Pontus Tidemand y Jan Kopecký, completan el Top 10.

Hayden Paddon no se reenganchó después de ser retirado por su equipo después del accidente del jueves.

Se espera más nieve y hielo en la tercera jornada del sábado, al sur de Gap. Los pilotos se enfrentarán a cinco especiales que sumarán 121.39 km antes del largo viaje a Mónaco antes del final del domingo.

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• ‘Monsieur Dakar’ logra su séptimo título en coches superando a Loeb, que se llevó la última etapa acumulando cinco en este Dakar 2017

• Nani Roma (Toyota), mejor español con su cuarto puesto tras ‘Los Tres Mosqueteros’ de Peugeot

Fuente: JAVIER ALFARO MANSO

Stephane Peterhansel no faltó a su cita con el triunfo y se adjudicó en este Dakar 2017 el que es el 13º titulo de su carrera en una prueba de la que es su mayor leyenda.

‘Monsieur Dakar’ partía en todas las quinielas como el principal favorito para hacerse con el triunfo, y ni siquiera Sebastien Loeb, que se impuso en la definitiva etapa con meta en Buenos Aires y en otras cuatro anteriores, fue capaz de arrebatarle la que es su séptima victoria desde que dejase las motos tras seis títulos para competir en coches.

Teniendo en cuenta que a esta última jornada Peterhansel llegaba con 5’32” de renta sobre Loeb, se antojaba como una utopía pensar en que el título podía escaparse de las redes de Stephane si no mediaba un accidente o problema mecánico de difícil solución.

Y no fue así, porque Peterhansel cedió 19” respecto a su compañero en Peugeot en los últimos 64 kms. cronometrados de este Dakar 2017, pero quedaron en anécdota cuando se subió una vez más a lo más alto de un podio acostumbrado ya a la huella de sus zapatos.

En cuanto al tercer cajón, fue ocupado por el tercero de ‘Los Tres Mosqueteros’ franceses de Peugeot: Cyril Despres. Fue cuarto en la etapa, superado por el Toyota Giniel De Villiers además de Loeb y Peterhansel, pero su lugar en el podio no corrió peligro.

Inmediatamente por detrás de Peterhansel, Loeb y Despres, aparece en la clasificación general el mejor español con la figura de un Nani Roma (Toyota) que firma un cuarto puesto siendo el mejor del resto dejando a parte a los a la vista inalcanzables Peugeot.

El piloto catalán luchó durante gran parte de la prueba por colarse en el podio, pero los más de 30 minutos que cedió en la antepenúltima etapa del pasado jueves, entre Chilecito y San Juan, lastraron definitivamente sus opciones de evitar que los cajones fuesen íntegramente ocupados por los Peugeot.

En cuanto a los Mini, apenas tuvieron protagonismo en este Dakar, con el argentino Orlando Terranova como su mejor representante en la general ocupando el sexto puesto.

El adiós de Sainz

En la lista de ilustres abandonos que no consiguieron alcanzar esta meta de Buenos Aires aparecen dos nombres marcados en rojo: Carlos Sainz y Nasser Al-Attiyah. El madrileño sufrió un accidente en la cuarta etapa que obligó a su retirada cuando precisamente ocupaba el liderato virtual en la búsqueda se su anhelado segundo triunfo en el Dakar, mientras que el qatarí, que se hizo con la primera etapa, dijo adiós a esta edición demasiado pronto en cuanto a las expectativas que le otorgaban el cartel de ser uno de los máximos favoritos.

También se despidió antes de tiempo Xevi Pons (Ford Ranger), segundo en la primera jornada sorprendiendo a todo la caravana para sufrir un fuerte accidente un día después que le mandaba de regreso a casa.

El resto de españoles

En el lado positivo de la balanza en cuanto a representación española, aparecen además de Nani Roma otros tres pilotos que consiguieron llegar al final de esta odisea: Xavier Foj (Toyota), que disputaba el Dakar por 27ª y alcanza su 13ª finalización consecutiva de un total de 22, Isidre Esteve (Mitsubishi), que gracias a su ‘cojín inteligente’ completó con éxito el que era su regreso a ‘su’ Dakar tras ocho años de ausencia, y la debutante Cristina Gutiérrez (Mitsubishi), que con solo 25 años ya conoce el sabor de cruzar la línea de meta de la prueba de referencia en el mundo de los raids.

Para todos ellos, desde luego que no resultó nada fácil llegar hasta la misma en lo que fue un Dakar marcado por la dureza anunciada que alcanzó su máxima expresión por la visita y los daños causados por las inclemencias meteorológicas.

Carlos Sainz  ha sufrido una vez más los rigores de esta durísima prueba. El piloto español se ha quedado atascado en un barranco de unos diez metros. El ganador del Dakar de 2010 ha sido remolcado hasta la meta de la Etapa 4, algo que reduce muchísimo sus opciones de podio. Ha llegado remolcado hasta el final de la etapa 4 con más de dos horas de retraso. Tanto él como su copiloto Lucas Cruz se encuentran en perfecto estado de salud, aunque sus primeras declaraciones no han sido optimistas: «He caído al barranquillo ese que hay, he dado cuatro o cinco vueltas de campana y no puedo seguir. Se acabó para nosotros», ha dicho.

Sainz ha explicado la dinámica del accidente: «Hemos llegado muy rápido en una curva a derechas, se me ha puesto de lado al frenar. He tocado el interior y ya hemos volcado y nos hemos caído abajo». Ya en la meta, cuando los periodistas de la organización le han consultado por la posibilidad de seguir en carrera, no anticipa buenas noticias: «No lo sé, no creo… no creo», ha dicho el veterano piloto madrileño.

En declaraciones a los medios españoles presentes en el Dakar, Sainz ha relatado cómo ha vivido el accidente y ha reconocido sentirse magullado físicamente.

«Tengo un poco de dolor de espalda, en el lumbar», señala según recoge el diario Marca. «Nosotros ya estamos fuera. No creo que se pueda reparar el coche porque está bastante tocado, pero lo están mirando. Yo, de todas maneras, no sé si podré seguir. A ver cómo estoy de la espalda porque estoy un poco fastidiado».

«Hemos llegado muy rápido a una curva y al frenar se me ha puesto el coche de lado. He tocado el interior y ha salido dando vueltas de campana, y me he caído a una zanja de 10 o 15 metros. Se han roto los radiadores y el cambio».

Fuente: www.wrc.com | Fotos: wrc / Press

El galés pilotará uno de los tres Ford Fiesta RS WRC del M-Sport World Rally Team en la apertura de la temporada, que comienza el 19 de enero.

Evans formó parte de la plantilla de M-Sport en 2014 y 2015, pero fue relegado a la categoría WRC 2 el año pasado y logró tres victorias con una Fiesta R5.

Este año, el coche de Evans utilizará neumáticos DMACK, mientras que sus compañeros Sébastien Ogier y Ott Tänak utilizarán Michelin.

El vigente campeón Ogier encabeza la lista del Monte con el número uno en su Fiesta, con Tänak y su nuevo copiloto Martin Järveoja llevando el número dos y Evans el tres.

Tras ellos, Hayden Paddon, Thierry Neuville y Dani Sordo de Hyundai lucirán los dorsales cuatro, cinco y seis, respectivamente, en sus i20 Coupé WRC.

Los pilotos oficiales del Citröen Total Abu Dhabi, Kris Meeke y Stéphane Lefebvre, llevarán el siete y el ocho en sus nuevos C3 WRC. Después de participar en el Rallye du Var de noviembre, el copiloto Gabin Moreau estará de vuelta junto a Lefebvre por primera vez en el WRC desde que se lesionó hace cinco meses en el ADAC Rallye de Alemania.

Craig Breen pilotará un DS3 WRC de 2016 en el Monte pero se espera que tome el segundo el segundo C3 de la marca en Suecia.

Los Yaris WRC de Jari-Matti Latvala y Juho Hänninen del Toyota Gazoo Racing, tendrán los números diez y once.

Jordan Serderidis es el único participante del nuevo Trofeo WRC para los World Rally Cars previos al 2017. El griego correrá con un Citroën DS 3 WRC, cambiando esta montura por el R5 con el que compitió en 2016.

Hay 12 inscritos en el WRC 2, encabezado por el ex piloto oficial de VW, Andreas Mikkelsen, que correrá con un Skoda Fabia R5.

El francés Eric Camilli es otro piloto de oficial de 2016 que se encuentra en el WRC 2. Después de una temporada en el equipo principal del M-Sport World Rally Team, vuelve a la categoría que disputó en 2015.

Seis pilotos están inscritos en el WRC 3 y cuatro en el RGT FIA, incluyendo tres Abarth 124 pilotados por François Delecour, Fabio Andolfi y Gabriele Noberasco.

Otros inscritos a destacar son Kevin Abbring (Hyundai i20) Pontus Tidemand (Skoda Fabia R5) y Simone Tempestini (Citroen DS 3 R5) campeón del Júnior WRC el año pasado. Todos correrán con vehículos R5 de la categoría RC2 pero no están registrados para puntuar en el WRC 2.

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